Un estudio realizado por la Universidad de Pennsylvania encontró que el síndrome de “Burn-out” (o de agotamiento crónico) empeora cuando los empleados sienten que su trabajo no es reconocido o valorado.

Estos son algunos síntomas de la enfermedad:

• La persona siente insatisfacción por todo.
• Se siente cansada desde que se levanta.
• Piensa que su trabajo nunca termina.
• Cree que trabaja mucho y no es bien remunerado.
• Ya no le alegra lo que antes le hacía feliz.
• Se siente estresada aun cuando se toma un tiempo libre.
• Se siente deprimida.
• Padece alguno de estos síntomas: insomnio, dolor de cabeza, mareos, dolores musculares, trastornos digestivos, infecciones, lesiones en la piel, trastornos respiratorios y circulatorios, digestivos y/o pérdida de peso.

Sergio Gadea, psicólogo laboral, tiene ésto qué decir al respecto:

• • “Las personas que tienden a padecer estrés crónico son aquellas que trabajan en temas relacionados con el dinero (como cajeros o vendedores) y con la toma de decisiones (como médicos y ejecutivos)” (Gabriela López,

  El Economista)

El estrés crónico no sólo perjudica y afecta nuestra psique, sino que reprime las funciones del sistema inmunológico (ojas en Ayurveda) y acelera la formación de radicales libres en nuestro organismo. Las personas estresadas enferman más rápidamente de infecciones, desarrollan más fácilmente problemas cardio-circulatorios y probablemente sean más susceptibles a una formación de cáncer.

El síndrome del agotamiento crónico “burn-out” está caracterizado por un largo tiempo de estrés vivido, pero no tratado. Es la consecuencia de un estilo desequilibrado de vida, marcado por una constante sobrecarga a todos los niveles. El resultado es una falta completa de fuerza tanto física como psicológica, así como graves trastornos del organismo a nivel orgánico y mental.

Lo que ahora está de moda es el Burn-out, que significa estar “quemado” por el estrés crónico provocado por exceso de trabajo.

Pero no se sienta solo. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de la mitad de los trabajadores en el mundo sufre de estrés, y ya se le considera una epidemia.

Sin embargo existe una diferenciación entre el estrés propiamente dicho y el burn-out.

En los lugares de trabajo, este síndrome se traduce en más enfermedades, ausentismo y baja productividad laboral. En Estados Unidos, el estrés provoca pérdidas por 300 mil millones de dólares al año, asegura el Instituto Estadounidense del Estrés (AIS por sus siglas en inglés).

Debido a que el Bum-out se origina en el lugar de trabajo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que para contrarrestarlo es necesario que las empresas efectúen cambios, entre otros, como:

• mejorar horarios y espacios de trabajo
• agilizar la comunicación con los empleados
• considerar sus necesidades familiares, y
• organizar actividades lúdicas en grupo.

Afecta a gran cantidad de profesionales de tipo asistencial o de ayuda a los demás. Hasta un 20% a 30% de los médicos, profesores, policías, enfermeras y asistentes sociales están afectados.

Uno de los factores que determinan que aparezca un desgaste profesional es la frustración continuada a la hora de lograr las expectativas que tenía la persona a priori. Por tanto, se “queman” más y en menos tiempo los profesionales que más se implican a nivel personal y profesional.

Cuanto más idealista y altruista sea nuestro concepto de la profesión a desarrollar, mayor es el choque con la realidad. Y por tanto, mayor es la posibilidad de “quemarnos”.

En 1977, Maslach y Pines definieron el término Burn-out como un síndrome de agotamiento emocional, despersonalización y baja realización personal, que afecta a individuos que atienden o ayudan a otras personas. Suele ser una respuesta al estrés crónico que aparece cuando trabajamos en contacto directo con otras personas y en condiciones laborales dificultosas.

No es más que el resultado de un fallo continuo de las estrategias que la persona utiliza para afrontar los conflictos con los que se va encontrando.

Suele generar en las personas afectadas un deterioro del rendimiento, actitudes agresivo-pasivas con los pacientes/clientes, la pérdida de responsabilidad y de la motivación para llevar a cabo la faena laboral.

Existe una serie de factores de riesgo que pueden llevar a una persona a padecer el temido Síndrome de Burn-out, el cual, a su vez, se caracteriza por una serie de síntomas típicos. Puedes leer cuáles son más abajo tanto los factores de riesgo, como los síntomas del Síndrome de Burn-out.

¿Cómo se mide el grado de Burn-out?
Existe un test: El Maslach Burn-out Inventory (MBI), un cuestionario de 22 preguntas que ha de contestar el propio paciente, y que valora los sentimientos y actitudes en el trabajo, en relación con 3 aspectos fundamentales:

1. El cansancio emocional. Sentirse exhausto por las demandas en el trabajo. Esto se ve reflejado en una pérdida progresiva de energía, desgaste, agotamiento, fatiga…

2. La denominada despersonalización. Mide el grado de frialdad y distanciamiento en las relaciones con los clientes. Se mide según la irritabilidad, actitudes negativas, respuestas frías e impersonales, e incluso agresividad hacia los clientes/pacientes/alumnos/proveedores.

3. Falta de realización personal. Mide el grado en que la labor ha cubierto las expectativas en cuanto a competencia, y obtención de los objetivos que nos habíamos propuesto personal y laboralmente.

NUESTRO PUNTO DE VISTA AYURVÉDICO PARA LA PREVENCIÓN DEL BURN-OUT

Adecuado uso de la técnica de “manejo del estrés”, la cual incluye:

• Aplicar una rutina ayurvédica en cuanto a alimentación y procedimientos como meditación y pranayama (respiración correcta).
• Evitar la sobrecarga de la agenda laboral
• Organización racional de las tareas a realizar
• Colocar límites (aprender y animarse a “decir no”)
• Producir un cambio en el patrón de pensamiento con tendencia negativa, a otro más realista
• Utilizar la técnica de resolución de problemas
• Implementar un adecuado equilibrio entre el tiempo dedicado al trabajo y el tiempo dedicado a la recreación y al ocio sin desgastes.
• Aprender a delegar, renunciando a la idea de querer controlar todo
• Hacer ejercicio físico principalmente el Yoga casi obligatoriamente.
• Implementar una dieta balanceada en proteínas y carbohidratos, de acuerdo a las necesidades calóricas individuales
• Dormir un mínimo de 8 horas diarias.

Marcus de Oliveira Teles, D. Ay. es Fundador, junto con su esposa, de Centro Ayurveda, un Centro de Sanación Integral con sede en las ciudades de Cuernavaca y México.Es considerado el Decano de Ayurveda en México

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